[Francia] Siempre del lado de lxs rebeldes, nunca con lxs chivatxs y lxs arrodilladxs.
Extraído y traducido de Act For Freedom Now.
Estos dos últimos meses (Marzo-Abril) las calles de las principales ciudades de Francia se han transformado en campos de resistencia, donde las protestas masivas y los enfrentamientos se están llevando a cabo en el marco de las huelgas generales que están en contra de la nueva legislación laboral del gobierno.
Barricadas, coches de lujo y de la policía quemados, policías y secretas apaleadxs, bancos destrozados, enmascaradxs con piedras en sus manos, son algunas de las imágenes que nos demuestran que en todos los rincones de la tierra la guerra contra el Estado y el Capital continua y que nada ha terminado…
«No pedimos nada, estamos tomándolo todo», «No hay insurrección sin fuego», «Destruye la esclavitud del trabajo», etc… son algunos de los cánticos del bloque negro y de los grupos anarquistas que se enfrentan y expresan su rechazo en las calles.
Como era de esperar, todo lo que está ocurriendo no podría ser sin los líderes sindicales y reformistas que hablan de provocadorxs, como el bloque negro con lxs fascistas, condenado las prácticas violentas contra el Estado y al mismo tiempo teniendo relacionándose con la policía. Porque, por suerte o por desgracia, pacifistas y negadorxs de la violencia -cuya existencia favorece claramente a lxs gobernantes- son un fenómeno global. Se acerca el momento en que tendrán lo que se merecen.
Al mismo tiempo, las fuerzas represivas usan un montón de gases lacrimógenos, golpean brutalmente a lxs manifestantes y detienen personas. En pocas palabras, todo lo hacen bajo las órdenes de sus superiorxs con el fin de proteger a sus jefxs y a lxs pacíficxs ciudadanxs-sujetos.
Ahora es más que evidente que la economía se derrumba, lo que resulta en que muestra su verdadera cara: Salarios de hambre junto a pésimas condiciones de trabajo, que contribuyen a un ambiente laboral propio de la Edad media, en el que el/la trabajador/as es el esclavo moderno de la producción en línea. Al mismo tiempo, la represión se intensifica y fortalece, para que el estado policial en las calles se convierta en una rutina y que el/la que busca el ataque contra el mundo de la autoridad dude de realizar su acción.
terminemos con los falsos dilemas. Quien elige pasividad, elige sus propias cadenas.
El momento es ahora, el lugar está aquí. Desde las calles de Francia a los callejones de Chile, desde las montañas de México a las avenidas de Atenas.
¡El mundo entero es un campo de disturbios!