[Madrid] Reflexiones a raíz de los conciertos del 8 de Octubre
Extrañido de la web de CSOA La Gatonera.
Antes de nada reconocemos que en la asamblea de ayer no debimos actuar acorde a nuestro propio texto, al ser evidente que no hubo entendimiento.
Ahora corregimos el texto y aclaramos que La Gatonera se declara feminista siempre que entendamos esta palabra como la necesidad de que los seres humanos puedan desarrollarse como personas libres independientemente de su sexo, género o sexualidad.
Desde el CSOA La Gatonera y algunas individualidades lanzamos algunas reflexiones con el fin de crear debates que nos ayuden a la resolución de conflictos que pudieran surgir.
Queremos aclarar que en La Gatonera se ha trabajado y se trabaja para no generar actitudes autoritarias (racistas, xenófobas, machistas, especistas…) porque entendemos que no tienen cabida en nuestros espacios.
En las Jornadas de Okupación del 7 y 8 de octubre se nos plantea un conflicto: nos comunican que algunos de los grupos que tocan en el concierto están incluidos en una lista de punk machista que circula por las redes sociales. Tras buscar info, preguntar a compas y debatir, no encontramos ni letras, ni actitudes, ni hechos que prueben que los grupos que tocarán en nuestro espacio sean machistas. Eso sí, encontramos mucha mierda por internet, mucho tomateo facebookiano y muchas habladurías sobre dicha lista, anónima, sin firmar, sin consensuar y sin explicar baremos en cuanto a la inclusión de grupos. Sí sabemos que esta lista surge de un conflicto anterior, por otro grupo de música pero no estamos de acuerdo con la resolución del conflicto vía lista negra, que sólo nos plantea 2 posiciones, 2 bandos:
1- Son machistas por sus letras y por lo tanto todo grupo que les apoye o haya tocado con ellxs, también lo es.
2- No son machistas porque es provocación, sorna, defienden la libertad de expresión, se dice que en sus relaciones personales no son así, etc…
Una vez más solamente se nos plantean 2 bandos, sin posibilidad de solventar el conflicto y a la vez vemos que se reproducen actitudes con las que no estamos de acuerdo (amiguismo, desviación del problema, faltas de respeto, sectarismos, descalificaciones…) Por otra parte, habiendo vivido la evolución del momento, nos encontramos en un estado de hastío general por discutir el mismo tema una y otra vez durante meses, y ante un problema que nos estanca creemos que debemos buscar soluciones para superarlo y seguir avanzando. Tras todo esto exponemos nuestras reflexiones y proponemos un debate colectivo
– Vemos positivo y agradecemos a lxs compañerxs la iniciativa de reflexión política sobre los contenidos de los grupos musicales que tocan en los CSOs. Las dinámicas de hacer conciertos con fines antirrepresivos puede llevar a descuidar estos aspectos. Entendemos la música como un arte a través del cual podemos expresarnos libremente, así como podemos entender la ironía, el humor negro, la provocación punk. Pero los espacios políticos afines no son sitios donde pueda haber letras en las que se juegue con cosas tan serias como una violación. Los contextos sociales cambian con el tiempo y ciertas provocaciones no son del agrado de todxs.
Pero siendo cierto que hay que hacer una revisión de valores y/o humor en los grupos de música que toquen en nuestros espacios, también tenemos que ser críticos con el tipo de “feminismo” con el que vamos a trabajar, ya que existen muchos tipos (institucional, victimista, autoritario…). Creemos que ciertos tipos de “feminismo” no pueden pasar por encima de nuestros valores y posicionamientos políticos, hay que hacer autocrítica y no desligarnos de nuestra lucha colectiva, la de destruir la autoridad y el poder. El feminismo o será antiautoritario o no tendrá lugar en nuestro espacio, y a su vez el discurso que generemos a partir de ahí debe ser carente de ambigüismos respecto a lacras como el machismo. Para ello hace falta una revisión de nuestras prácticas y comportamientos, y tenemos que ser conscientes de nuestras limitaciones y contradicciones para superarlas con decisión y humildad. Hay que crear espacios de debate y reflexión para ir alcanzando acuerdos y no imponerlos.
– No nos gusta el ciberactivismo, rechazamos los sistemas de comunicación diseñados por el enemigo como base para construir nuestra política, hemos caído en la trampa del sistema tecno-industrial. Echamos de menos las relaciones directas, el cara a cara. El activismo a través de internet y desligado de un espacio físico de debate, construye posiciones anónimas y por lo tanto sin asumir las consecuencias de lo que se dice. Todo esto sin conocernos como personas e ignorando el trabajo que tenemos detrás cada unx, criticando más por facilidad que por convicción, acusando e intoxicando sin asumir las consecuencias, descontextualizando opiniones y crucificándolas como si ya fueran una posición política.
Por otro lado es responsabilidad de quien lee información por la red el no usar la lógica ciudadanista, confiando en la responsabilidad de quien dicta y sin contrastar opiniones ni informaciones, pretendiendo que otrxs lleguen a las conclusiones para asumirlas como propias. Firmar o escribir comunicados no resuelve los problemas. Posicionarse es más que tener una opinión pixelada, y creemos que transciende sobradamente a internet y a sus cuchicheos. Aquellas críticas que puedan tirar abajo el trabajo de otrxs deben ser abordadas igualmente desde un punto crítico, desde la humildad, la reflexión y con debate conjunto y creemos que las “listas negras” no invitan a esa reflexión. Tampoco podemos sacar conclusiones sobre conflictos o debates por Internet cuando tenemos compañeros que no lo utilizan, ya que les estaríamos excluyendo.
Por tanto, las opiniones que tengamos de los grupos que usen nuestro espacio serán propias, no hechas por internet, y nuestras decisiones estarán basadas en el diálogo y el trato directo con quien sea que quiera aportar sus ideas en asamblea con nosotrxs, a lo cual os invitamos.