Recibido por corre electrónico:
Comunicado recibido el 12/02/2018:
Delaciones en cadena… Si claro, ¡en México City!
“Lo que se interponga en nuestro camino, lo derrotaremos”
Antes que nada, un enorme y cordial saludo.
Hace poco más de cinco años y medio que me exploto accidentalmente una de las dos bombas que portaba, afortunadamente fue la bomba menos potente y que sería destinada a las oficinas del partido político PRD (la otra seria para una de las sedes del PRI, en ese momento me importaba una mierda cual partido político fuese, si hubiera existido Morena por igual hubiera atentado contra su sede). Fue la noche del 26 de junio del año 2012, justo un día después de mi cumpleaños. El mejor regalo que me pude haber dado fue el accidente, me decían los policías de investigación que me custodiaron en el hospital.
El motivo por el cual me exploto la bomba, motivo que hasta ahora había sido un misterio y un chismerío al interior del movimiento anarquista y del espectro insurreccionalista, que, segundo el vox populi, oscilaba entre “haber hecho la bomba mal o bajo presión o que la persona de nombre Felicity Ryder y yo hacíamos competencias sobre quien ponía más bombas y por eso me exploto (chisme que hasta el día de hoy circula entre los círculos anarquistas del D.F., y que ha producido únicamente cosas perjudiciales para mi), que si la explote con intención, etc.”… no fue otro motivo más que el siguiente: que accione la bomba en el lugar inadecuado, es decir, que la accione cercas de un transformador eléctrico, por lo tanto, al pasar debajo de este, el campo electromagnético que desprende fue suficiente para calentar el filamento del foco de 1.5 voltios y esto detono el polvo dinamita; la segunda bomba no exploto porque en ese momento aún no había conectado el interruptor-circuito. Pero este error fue debido a una distracción que tuve en ese momento, una distracción que nunca voy a perdonar ni pasar por alto.
Ahora si pueden dormir tranquilos, el dilema está resuelto, no hay nada más que decir al respecto.
Sin embargo, esta carta no es únicamente para aclarar porque me exploto la bomba, sino que también es para notificar a la audiencia de espectadores anarquistas una situación que ha sucedido a lo largo de estos años que he estado sustraído de la justicia del Estado. Sin más, es sobre una delación, una de muchas, usando el ejemplo que expondré para arrancar la reflexión o la acción contundente respecto a quienes no necesitan ser mínimamente torturados para delatar a compañeros anarquistas o hacer chisme sobre ellos y así ponernos en un riesgo latente.
Hay dos cosas que voy a comentar en la presente carta, comunicado público, choro o como quieras llamarle. Disculpa si sueno arrogante, si sueno duro o agresivo, pero literalmente me importa una mierda lo que pienses al respecto; estos calificativos irán destinados dependiendo de tu estado de ánimo, de tus sentimientos de inferioridad, tu baja autoestima, tus prejuicios, tu ideología de mierda o bien, de tu manera de ver las cosas que expondré, de tu perspectiva y tu critica bien enfocada. Lo que sí, es que me ahorrare tanta palabrería e iré directo al grano.
Delaciones en cadena
Bien, hace ya mas de un año que un individuo anarquista quien durante los últimos años de la época de los 90’s hasta la mitad del año 2000 estuvo en prisión a causa de un “delito común”, en un par de asambleas abiertas (al menos me consta que en dos realizadas en el interior de la Biblioteca Social Reconstruid) afirmo que la Cruz Negra del Distrito Federal dijo que “los compas que estábamos en fuga (refiriéndose al Chivo y a mi) solamente nos estábamos paseando de (dijo el lugar) a (dijo el otro lugar) con el dinero que se nos da en apoyo, que así nos pagamos nuestros viajecitos de México a países de Centro América, ida y vuelta.
Ante todo quiero dejar claro que NO me consta que CNA emitiera tal afirmación delatora, pero que SI me consta que esas palabras salieron de la boca de ese individuo quien es amigo y compañero de CNA-DF y me consta no por una sino por varias versiones de varias personas distintas que ni se conocían entre sí pero que estaban en esas asambleas abiertas. Y me consta porque lo conozco y sé qué tipo de persona es.
Ante esto tengo un par de cosas que afirmar, siempre asumiendo el riesgo que conlleva hacer este tipo de aclaraciones de manera pública, aunque al final de cuentas, que un compañero preso o en fuga tenga que decir cosas que de alguna manera le puedan perjudicar, no siempre es su culpa como muchos lo quieren hacer ver, sino que es una responsabilidad colectiva que recae en el movimiento anarquista, ya que gracias a la gran bocota de algunos, muchos compas se sienten y nos sentimos presionados para emitir este tipo de respuestas -sobre todo cuando de los que conforman el llamado “movimiento” anarquista y peor aún, el espectro insurreccionalista, no hay una reacción directa hacia este tipo de infamias y hacia este tipo de individuos. La mayoría de los insurreccionalistas se la pasan escribiendo consignas en sus comunicados pomposos y se la pasan haciendo acciones para no perder su lugar en la escena-espectáculo, pero en el momento en el cual se trata de usar las armas para aleccionar a los delatores y habladores nadie hace nada, nadie hace nada por el simple hecho de que todos son unos queda bien, de que les importa mucho su imagen, su status, la imagen de sus grupos anarcopunks de música revolucionaria y cosas así. ¿Entonces dónde queda la llamada Solidaridad Revolucionaria de la que tanto presumen los insurreccionalistas? ¿La Solidaridad Revolucionaria se reduce únicamente a comunicados, bombazos y expropiaciones o acciones vistosas para hacerse visibles en el micro mundito irreal anarquista?
Aquí las cosas que tengo que decir.
Primero. ¿Dinero de quien nos andamos gastando, de tus amigos de la CNA-DF que te protegen? ¿Cuándo mierda tú me has dado algo de dinero para llevarme un alimento a la boca? ¿A ti te consta lo que afirmaste? ¿Porque nunca me lo hiciste llegar en carta a título personal si tenías esa duda, ¡¡¡cobarde de mierda!!!? ¿Cobarde de mierda que frente a mí nunca dijiste nada y bien te sientes hablando mierda de mi cuando sabes que no me es tan fácil ponerte en tu lugar? ¿Porque cuando supiste que yo ya sabía, en vez de dar la cara, te anduviste en Guadalajara fingiendo estar en Tijuana y viceversa y seguramente tus protectores ya te ayudaron a irte al gabacho, saliste corriendo de miedo o de qué? Además que desde hace mucho tiempo yo (Chivo no lo sé) no he recibido nada del movimiento anarquistas más que pura mierda, mucho menos dinero.
Segundo. Este tipo de habladurías solamente ponen en riesgo a compas en fuga o en prisión, pues independientemente de que sea verídico o no, los datos que se dicen siempre se crea una reacción de delación en cadena, ya que unos hablan y otros lo reproducen, pero al final todo se deforma y cae en informaciones que pueden únicamente, bien, o ayudar a la policía a localizar a compañeros en fuga, bien, o engordar expedientes e investigaciones contra compañeros en prisión.
No conforme con decir esas cosas sobre nosotros dos (sobre el Chivo y yo) este individuo habla a cerca de algunos individuos quienes en el pasado, es decir, en mi vida “legal”, fueron mis compañeros de lucha (entendiendo por esto como una diversidad de maneras de intervenir) y vida. Este individuo los acusa de “sacar dinero a la banda (lxs compas) para nuestros viajecitos”. Quitando de en medio que la fuga es siempre movilidad constante -aunque sea para ir de shopping a San Cristóbal de las Casas y de paso vender algunas chamarras Northface que se consiguen en la paca- este tipo de afirmaciones evidentemente ponen en riesgo a aquellos individuos los cuales desde que yo me fui nunca he vuelto a ver y poco he sabido de ellos. Los pone en riesgo puesto que esas habladas e “indirectas”, pueden producir una investigación en la contra de esas personas por obstrucción de la justicia, una investigación que si bien, partiese de una investigación propia del Estado, ellos la podrían asumir como una consecuencia de la lucha, pero que una investigación así no la podrían asumir como tal cuando esta tiene como raíz la fanfarronería de un individuo quien quiere sobresalir entre los más jóvenes e impresionar a las chavas.
¿A individuos como el de este caso que les toca? ¿Cómo tratar con ellos o hacerles reflexionar? ¿Tendremos que regresar a los viejos códigos revolucionarios o con la reflexión basta?
Afortunadamente, hoy, solo tengo ánimos de describir esta situación, sin embargo hay muchas pero muchas situaciones y muchos individuos e individuas que a lo largo de estos años, desde que me exploto la bomba y desde que me di a la fuga, no han hecho más que hablar cosas que me han puesto en riesgo y a otras personas, no han hecho más que inventar chismes, tirar mierda…. pero no me bajoneo tanto pues a cada problema una solución y poco a poco brotan las cosas.
Por último una anécdota, a ver si hacen memoria.
Pocos días antes que partiera de mi ciudad encontré a una de mis abogadas (en ese momento aún estaba yo en una situación “legal”, es decir que todavía no me fugaba a la justicia del Estado ¡¡aclaro!!) me contó que días antes fue al juzgado federal (el cual ordeno mi segundo arresto del 20 de Enero de 2014) para solicitar una prórroga de un par de días más para presentarme a firmar. Durante esa visita, la juez, además de invitarle cordialmente a que me llevara por voluntad propia a firmar, le dijo que yo ya estaba bien jodido (ensartado fue la palabra) ya que después de mi detención dos mujeres de nacionalidad española había ido a hablar con ella y habían dicho todo sobre mi, habían hablado todo (que la verdad no sé qué sea “todo”) y me habían “hundido”. En un primer momento lo dudamos pues esa “info” provenía de una servidora del Estado, posteriormente, entre la paranoia, pensamos que fueron las compas Amellie y Fallon quienes en medio de lo que les sucedió, que fue muy fuerte, dijeron cosas (que, pues no sé qué pudieran decir en realidad), pero finalmente, tras darle muchas vueltas al asunto, buscar informaciones, analizar, recordar, comunicarnos con esas compas y pedir su honestidad, pero sobre todo, ver las cosas con claridad tras lo que me sucedido cuando me fugue y la mierda que por tres años cierta gente hicieron de mi vida en fuga, dimos justo en el clavo y hoy puedo afirmar con toda seguridad que no hay menor duda de quienes fueron esas pone dedo, de quienes se trataron, a quienes les interesaba que me jodiera… digo, en caso que que la señora juez no estuviera mintiendo a mi abogada, verdad… al final de cuentas ¿Qué diferencia hay al momento de intentar saber quién miente, si un juez y un anarquista?
Tomen esta anécdota como un preludio para mi siguiente carta en la que hare una humilde reflexión individual sobre mi militancia, pero sobre todo una crítica respecto a la lucha anarquista insurreccional en la intensa época que me tocó vivir.
“Cuando la nieve cae y los vientos blancos soplan, el lobo solitario muere pero la manada sobrevive”
Atentamente:
Mario Lopez “Tripa”
Desde algun lugar de este enfermo mundo, ¡misantropia y naturaleza por siempre!
10 de febrero del año 2018