Fraguas resiste
Escribimos estas líneas desde Fraguas, un pueblo okupado y rehabilitado en la Sierra Norte de Guadalajara. Pueblo que hace 6 años no eran más que ruinas y que mediante el trabajo y la ilusión de cientos de personas que han apoyado este proyecto autogestionado, asambleario sin jerarquías, con el principio de sustentabilidad con el medio natural que lo rodea, aprendiendo día a día a sostenernos cada vez menos atadxs al sistema capitalista, cuidando la tierra y recogiendo sus frutos, sin dañarla y aprendiendo a vivir en ella, ya que desde que nacimos sólo fuimos enseñadxs a explotarla. Practicando una existencia coleciva y no cayendo en el individualismo competitivo que promueve el modelo productivo capitalista. Rehabilitando con los materiales que nos da la tierra, las ruinas que mediante la expropiación fraudulenta en un primer momento dejó el estado franquista en el 68, expulsando para siempre a sus antiguos habitantes por un puñado de pesetas y para ser condenadxs a una vida de trabajo asalariado en la mayoría de los casos; y más tarde las prácticas militares que se llevaron a cabo en los 90.
Ahora mismo una sentencia dicta que «para restablecer el equilibrio» debemos pagar la demolición de las reconstrucciones realizadas y condena a más de dos años de prisión a 6 personas. La Junta de Castilla la Mancha (Podemos en coalición con el PSOE en la anterior legislatura y el PSOE con mayoría absoluta desde mayo) encubre así las atrocidades realizadas en el franquismo. Pretenden dejar en ruinas el pueblo una vez más, expulsando a sus habitantes y dejándolo en el olvido.
El Estado reprime cualquier intento de atacar o plantear alternativas a su dogma mercantilista. Proyectos autogestionarios y horizontales como este, que escapan a su lógica de consumo, están en su punto de mira. En esta lógica de dominio y control atacan Fraguas, al igual que han atacado y seguirán atacando cualquier iniciativa que se les oponga.
No podemos permitir que logren sus objetivos y nos aplasten sin más, tenemos que defender nuestros espacios liberados. Apoyándonos entre todxs tenemos más fuerza y entre todxs lo conseguiremos. Con toda la humildad queremos invocar el espíritu de otras luchas como las de Sasé, las Zad, Hambach, Errekaleor y otras muchas historias de resistencia, que sirven de semilla o inspiración para todxs.
Actualmente no hay una fecha concreta de desalojo pero este podría ser inminente y no lo vamos a permitir. Confluyendo distintos tipos de estrategias pero con la firme convicción de que aquí nos vamos a quedar y continuar experimentando formas de vivir al margen de la autoridad y el control.
Convocamos unas jornadas indefinidas de resistencia en el pueblo de Fraguas.
Pueblos vivos en lucha.