[Prisiones chilenas] Carta de un compañero anarquista encerrado, 23 de febrero 2020
- Recibido por correo electrónico.
A todxs lxs compañerx encerradxs o perseguidxs:
Estas letras las escribo plasmando todo el newen y el fuego insurrecto de mis convicciones anárquicas como un mínimo gesto de complicidad hacia ustedes.
Me encuentro encerradx hace algunos meses dentro de las mazmorras de la democracia chilena. «Oasis» del capitalismo en latinoamérica que es (aún) fuertemente golpeado por la bellísima tormenta insurrecta de la Revuelta Social que puso fuego y objetivos en las manos de lxs explotadxs y que donde nosotrxs lxs ácratas, pese a nuestras falencias y errores, continuamos agitando con todas las armas y herramientas que tenemos a nuestro alcance, desidealizando el contexto, entendiendo que esto es un capítulo más de la Guerra Social Mundial en curso, y que podemos expandirnos y sacar lecciones dándonos cuenta de sus propias limitaciones.
Dejando fetichismos, sectarismos y falsas dicotomías de lado vemos cómo nacen al calor de las barricadas un sin fin de iniciativas como: asambleas barriales y de trabajadorxs, centros culturales okupados, bibliotecas, editoriales, discusiones, marchas, huelgas, funas, intervenciones, acciones, enfrentamientos, ataques, conspiraciones, redes de apoyo y solidaridad con lxs presxs políticxs, etc… con un claro espíritu libertario que se propaga a gran velocidad en situaciones como las que aún vivimos y que es tierra fértil para que las ideas y prácticas anárquicas sean abrazadas por lxs oprimidxs en lucha.
La espada de doble filo con la que el poder responde, trata de, por su lado, aplacar el espíritu insurreccional a través de la institucionalidad, con todos los partidos y movimientos del orden cuadrándose con esta democracia asesina, haciendo ilusiones con cambios que no cambian nada, elecciones, plebiscitos, participación ciudadana, engaños hechos para arrebatar la autonomía y la potencialidad revolucionaria, la capacidad que tenemos nostrxs mismxs de organizarnos sin jefes, dirigentes o «especialistas», parásitos que solo viven de lo que puedan quitar a lxs de abajo, haciendo arreglos que solo favorecen a ellos y su clase, aliados eternos y fieles a los explotadores.
El camino de la revuelta siempre será el de la horizontalidad, la autonomía, la descentralización, la ilegalidad, tanto en la construcción como en el ataque.
El otro filo de la espada es la cara más visible de la violencia en la que se fundan todos los estados, la militarización de la vida, la policía, el control, la ley, la mutilación, el encierro y el asesinato que al hacerse masivos le quita el maquillaje a este sistema develando, por fin, que dictadura y democracia siempre han sido entonaciones de la misma lúgubre canción.
Atreverse a enfrentar el poder siempre conlleva la posibilidad de caer en prisión, sea por acciones fuera de la ley o por acomodo y excusa de los poderosos para arremetidas represivas y shows mediáticos de inteligencia. Esto lejos de ponernos como víctimas, refuerza aún más la convicción de batalla que tenemos en contra de nuestros enemigos que no caerán solamente por la fuerza, pero tampoco sin ella.
El estado, el capital, el patriarcado y todas las relaciones sociales que de ellos derivan son el sostén y fundamento de la explotación de la tierra y todo lo que en ella habita, incluídxs lxs animales humanxs.
Sea en las regiones de Ecuador, el Líbano, Irak o Kurdistán, sea en las calles de Hong-Kong, Beijing o Atenas, en los barrios gringos o en las caras calles de París, en Bogotá, Río, el DF, en Baires o Montevideo. Sea en Rusia, Filipinas, Papúa Occidental o en las revueltas calles de Santiago y el Wallmapu.
La lucha tiene que tener una óptica global, ya que las distintas opresiones que cruzan nuestrxs distintxs cuerpxs y territorios se entrelazan para alimentar el mismo pútrido sistema, debemos estudiar y ser inteligentes para identificar el papel que juegan los territorios donde luchamos en el entramado internacional de explotación con el fin de hacer nuestra organización y nuestro ataque cada vez más certero y más a la cabeza de los parásitos explotadores.
La batalla dentro de las cárceles también tiene que ser planetaria, lxs anarquistas jamás hemos justificado separaciones tan absurdas como la patria y la soberanía nacional, nos sentimos hermanadxs por nuestras ideas y también por nuestra condición de presxs políticxs anarquistas en las cárceles del estado, por lo tanto esto es un llamado a estar atentxs e informadxs de lxs compas presxs en todo el mundo. Que creemos redes de solidaridad prácticas con campañas, acciones, gestos y todo lo que nos vaya reconociendo en la lucha, que nos encontremos como parte de la guerra social y aportemos a ella con nuesta fuerza, análisis y coherencia, haciendo del apoyo mutuo más que palabra escrita, que sea el vuelo de pájaro que se alce sobre los muros de las prisiones y las fronteras, abrazando con el calor del fuego anárquico a todxs lxs compas encerradxs, perseguidxs o en lucha en todos los continentes y rincones del planeta.
Escribámonos, conozcámonos, solidaricemos y actuemos sabiendo que no estamos solxs, ocupemos esta potencia para hacer temblar al poder que solo intenta aislarnos y separarnos. Accionemos cada vez más coordinadxs y con proyectualidades claras, cuidemos la calle y nuestras vidas, armemos orgánicas que en el aquí y en el ahora prefiguren el mundo nuevo que llevamos en nuestros corazones y que nunca nos tiemble la mano en responder a la violencia de los ricos y su sistema, que no se olviden que son mortales y tienen nombres y direcciones. Contra ellos todo nuestro odio, entre nosotrxs todo nuestro amor y apañe para ir resolviendo todo lo que se presente en este enmarañado camino revolucionario.
Estamos infectadxs de este sistema que por imposición heredamos, ir dándonos cuenta de esto, individual y colectivamente es también una parte pivotal de la anarquía, rompiendo dicotomías, develando que la dominación nos afecta de muchas formas, hasta en lo más íntimo de nuestros miedos, traumas, actitudes y deseos. Con esto en mente podemos generar espacios que desde la fraternidad puedan o ayuden a resolver o terminar problemas. La perfección y la pureza son solo engaños cristianos que nos impide la humildad y el escuchar, destruyamos todo lo que nos convierte en esclavxs, adentro y afuera de nosotrxs mismxs. No tenemos todas las respuestas, no veneramos a ningún salvador o mesías, no somos creyentes, ni religiones ni sectas, mucho menos un club de amigxs, vamos haciendo camino al andar, sigamos paso firme hacia la imparable e infinita liberación total, hacia la revuelta, la revolución social, hacia la insurrección y la anarquía.
Hagamos de la bandera negra revolucionaria un peligro latente y real contra el poder, se presente del color que sea. Este escrito de solidaridad va con especial preocupación y newen a lxs recientemente condenadxs compas en la región rusa, presxs y torturadxs por los delirios de la FSB y compañía. Que sepan que no están solxs y que en algún lugar tan lejano como la región chilena habemos afines que acompañamos sus pasos y que los nombramos en la prisión y en la calle.
A lxs compas en las prisiones del fascismo italiano.
A lxs compas encarceladxs en la península ibérica.
A lxs compañerxs de Lucha Revolucionaria, de las CCF y a todxs lxs compas en la prisión de Korydallos y los demás penales del mediterráneo.
A lxs compas que han dado la vida y que aún resisten en las montañas kurdas y en los valles de la región turca.
A mis compañerxs, prexs políticxs de la revuelta y la guerra social en los penales de Conce, Valpo, La Serena, Antofa, Santiasco, Temuco, Angol, en las cárceles de menores y demás prisiones del territorio dominado por el estado chileno.
Que sepamos nosotrxs y nuestros enemigos que no estamos abandonadxs. Que si tocan a unx nos tocan a todxs, que lxs carcelerxs dejen de caminar tranquilxs y en paz, que seamos siempre un peligro para ellos y su comodidad.
Sigamos avivando la llama de la revuelta.
Sigamos construyendo nuestro anhelo anárquico en el presente, cuidemos y abracemos a todxs lxs cachorrxs que buscan y van encontrando la vida libre, hagámonos cargo también de eso.
Con la Claudia, el Mauri, el Jhonny, el Angry, Lambros, Alexis, Orso, Valerian, Hankum, Zoe, lxs compas caídxs en la revuelta, con todxs nuestrxs ancestrxs asesinadxs y con todxs lxs que han encontrado la muerte luchando contra la dominación.
Sigamos procurando que ¡Viva la Anarquía!
Un Anarquista Preso Político de la revuelta en la región $hilena.
23 de febrero, 2020